¿Por qué callar?

Hablemos de nuestra experiencia, en nuestra carrera como relacionadores públicos estamos ligados a todo lo que es comunicación, en otras palabras para nosotros TODO comunica, desde el hecho de saludar, la postura, la comunicación interna,  la externa, y así podríamos hacer una lista infinita, pero que pasa cuando nos toca dar nuestra opinión acerca de algo, de cuando leemos un artículo, de cuando algo nos gusta o no nos gusta, con qué frecuencia lo hacemos realmente sincero, o es acaso que nos da miedo ganarnos el odio o el rechazo de las personas y preferimos decir que todo está bien para no generar discordia, o es que también dudamos de nuestra propia capacidad de juicio.

 Es ahora donde me pregunto, ¿HABLAMOS CON LA VERDAD? , leyendo acerca de la teoría del espiral del silencio que nos dio nuestra profesora, creo encontrar muchas respuestas, pero para ser sincera también debo decir que me siento identificada. Esta teoría menciona parte del supuesto básico de que la mayor parte de las personas tienen miedo al aislamiento y, al manifestar sus opiniones primero tratan de identificar las ideas, para luego sumarse a la opinión mayoritaria o consensuada. En esta disyuntiva la principal fuente de información serán los medios de comunicación y estos definirían el clima de opinión sobre los asuntos de que se trate.

Es cierto y creo que a muchos nos ha pasado , a veces tenemos miedo a opinar por qué podemos hacer el ridículo, ¡¡o las personas nos dicen pero como piensas eso!!, por no ser aceptados en un grupo, nosotros mismos modificados nuestros pensamientos para poder agradar, y mirándolo fríamente creo que estamos mal, empezando por que estamos en un país libre , donde se supone prima la democracia, pero recalco yo creo que es un tema de inseguridad de nosotros mismos, o no contamos con argumentos necesarios para debatir y decir porque no estamos de acuerdo.

El opinar diferente no nos hace malas personas, ni menos creíbles, y no porque la masa o el grupo en general este de acuerdo significa que nosotros debamos estarlo, quizás la minoría pueda ver cosas que la mayoría no ve,  pero si invito hacer consciencia en que si vamos a debatir o a persuadir, sea con respeto, con argumentos, seamos congruentes y coherentes. Rompamos cadenas tratando de generar cambios positivos para nuestro grupo y sociedad, y más como relacionadores públicos que proyectamos tanto de adentro hacia afuera.

Gracias por leer un pedacito de mí,

Paulynne

 Uno no debe adaptarse al cambio, sino crearlo.

Jorge González Moore